Me dio mucho gusto recibir el primer pedido de este año, una jirafa como la primera que tejí para regalar a una amiga.
El pedido fue de una compañera del trabajo de mi mamá y por casualidad una compañera mía de la secundaria me pidió también una jirafa:
Disfruté mucho haciéndolas, aunque seguí este patrón con ligeras adaptaciones, no son idénticas las dos jirafitas: la maravilla de lo hecho a mano, que cada uno es especial y diferente.