Había dejado pendiente el tema de tejer personas” después de que mi primer intento” resultara fallido. Pero para el 14 de febrero me hicieron un pedido especial y me decidí a hacerlo, ya había estado practicando con otros proyectos menos “personales”.
Lo primero que hice fue tomar el modelo de un amigurumi que tengo empezado, para tener una idea del tamaño. Además me basé en las mascotas futboleras” que había hecho para las proporciones.
Luego pregunté especificaciones del pedido: colores de la ropa, pelo y el detalle que me señalaron, que tuviera un corazón en sus manos.
Me puse a trabajar y por la premura y los imprevistos, no pude tomarle fotos del paso a paso, sólo del resultado final. Sin embargo, sí tomé nota mental de algunos detalles: empezar por los pies me da mayor sentido de la proporción, más vale que quede chaparrito a que quede gigante, ajustar los brazos al cuerpo y entre sí (aunque en este caso van además pegados al corazón, si sólo los ajusto al cuerpo quedan un poco sueltos), rellenar poco a poco para ver el tamaño real y ¡adiós nariz!
He aquí el resultado:
Para los ojos usé un nuevo estilo, una especie de botones que me encontré en una mercería y que como no tienen ajuste propio, tuve que pegarlos por dentro con fieltro y silicón.
Me gustó mucho el conjunto, la cara feliz con el corazón en los brazos y lo mejor, es que quien lo pidió también quedó satisfecho: una exitosa adopción más.
Ahora tengo entre manos otro proyecto de tejer personas, espero que resulte como lo espero.
[…] poco tiempo para tejerlo y segundo porque eran un par de personitas. Ya he hablado aquí , aquí y acá de mis dificultades al tejer personas, por eso el pánico al […]