En mi camino en el tejido de personas, otro reto con el que me topé fue el cabello. Me puse a revisar fotos de amigurumi en diferentes sitios, para inspirarme y sobre todo, para tener opciones y ver cuál se adaptaba mejor a mi estilo de tejer.
La primera opción que utilicé fue “coserle” el pelo por encima con el mismo tipo de estambre:
El problema con esta técnica fue el pedacito que me quedó como sobrante al final, porque no le calculé bien la extensión de estambre.
La segunda opción fue usar la técnica que me enseñó mi mamá para hacerle las barbas a las bufandas:
Mi problema fue que me quedó disparejo el largo de los cabellos, pero nada que unas tijeras no puedan remediar.
La tercer opción y un tanto a la desesperada, fue tejer una especie de peluca plana y luego coserla a la cabeza:
El problema con esta técnica fue ajustar el tamaño del cabello al de la cabeza.
Tres técnicas con sus propias especificaciones, creo que cada una funciona para cada tipo de persona tejida, la pitufina” no hubiera quedado igual de linda con la técnica de la peluca.
La próxima semana, otras tres técnicas que he usado para tejer cabello.