Si bien ya tengo mi escenario para sacar las fotos, he descubierto que tomar algunas en “locaciones reales” le da un toque diferente al resultado.
La primera experiencia fue con los gatos lectores y fue fácil elegir el lugar: mi librero, donde cupieron perfectamente, en la primera repisa los pequeños:
Y en la segunda los grandes:
Intenté sacar fotos en uno de los jardines/parques cercanos a mi casa y no tuve suerte, los alrededores no resultaron muy fotogénicos:
Mi siguiente intento fue en mi trabajo, con muy buenos resultados, sobre todo en el techo, donde está el comedor y hasta hace unos días, había flores muy lindas:
La otra locación en mi trabajo es el jardín del primer piso, donde hay unas bancas y pastito:
También lo intenté en un restaurante con juegos para niños:
Un muy buen lugar cuyo único detalle es que me queda muy lejos de mi casa, es un parque con juegos cerca de Plaza del Sol:
Voy a seguir buscando locaciones cercanas a mi casa, para ambientar a los animalillos.