Una persona que ya había confiado en mí y me había hecho un pedido de animalillos tejidos con amor, me dice: Veo que no has hecho mascotas de equipos de futbol, ¿me haría unas? Así que rauda y veloz investigo los uniformes y animales de los equipos pedidos y me pongo a hacerlos, empezando por los pies:
Espero haber calculado bien el tamaño porque luego “crecen” casi sin notarlo, ya veremos el resultado final.