Empecé a tejer un pequeño animalillo, con la idea de una colección que tejí hace un tiempo. Tenía dos objetivos en mente: tejer un animalillo pequeño pero con personalidad y que se pareciera a una mascota real. Para lograrlo había tres elementos para considerarse: los colores, las orejas y la expresión de la cara. Con las orejas no tuve mayor problema, primero tejí el cuerpo y con base en ese tamaño, hice las orejas.
Aquí el cuerpo de lado:
Decidí tejer la parte superior en un tono de café más oscuro para darle más parecido a la mascota real.
Una foto del cierre del cuerpo, en la parte de abajo:
El cierre del tejido es a veces una cuestión difícil: debe ser exacto en dónde hago el pase del hilo para que quede lo más liso posible.
Las orejas también las tejí en el tono de café más oscuro, para que combinaran con la parte de arriba del cuerpo:
La cola también tendrá una parte de cada color: la punta más oscura que el resto.
Me queda ahora el tema de la expresión de la cara, espero que me quede como la imagino.
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